Los estándares de calidad exigidos en la soldadura de aluminio garantizan la fiabilidad y la consistencia del proceso, ofreciendo una construcción fuerte y duradera muy superior a la de la fibra de vidrio.
La soldadura de aluminio no depende de factores tan difíciles de controlar como la temperatura ambiental, o la limpieza y el polvo en suspensión, como ocurre con la construcción en fibras y resinas.
La construcción en aluminio permite garantizar una calidad máxima en todo el proceso: la recepción de los materiales, que ya vienen certificados y clasificados (chapa de aluminio, hilo, gas), y las nuevas máquina de soldar electrónicas, permiten que el producto terminado tenga una gran fiabilidad.
El aluminio es un material 100% reciclable, por tanto es 100% ecológico. El residuo generado con la construcción en aluminio no es tóxico, y es igualmente reciclable. No ocurre lo mismo con la fibra y resinas, de alta toxicidad y muy negativo impacto ambiental.